En 1968 Serafin abrió con ilusion y mucho trabajo el Bar que, durante algunos meses, se llamó "El Picón" (como una tierra que tio Pepe tenia en Llaso), antes de tomar su denominación definitiva. No fue hasta 1984 cuando se trasladó a su actual enclave en la antigua portalada de Tío Benedicto.
Durante estos 45 años ha sido el eje de la vida social de Las Salas. Alli se tomaban vinos y cañas (las mejores tiradas de la Montaña), se comía muy bien, se leía la prensa, se veían los partidos de fútbol, se jugaba al tute, al mus, antes al dominó, se charlaba -sobre todo se charlaba- y se encontraba uno con la gente.
Ahora se cierra, parece que definitivamente (aunque nunca se debe pronunciar esta palabra), y no sabemos qué nos deparará el futuro. Me gustaría recordar a todos los que pasaron por ese mostrador sirviéndonos con sonrisas y paciencia, pero no me acuerdo. Mencionaré solo a Serafin, Enedina, David, Sonia, Manuela, Mari Carmen y también a Quique. Y a Vania y Noa que, aunque pequeñas, nunca olvidarán sus primeros años correteando y animando este bar. Para ellos nuestro recuerdo cariñoso
Hoy es un dia triste. Suerte a todos, incluido el pueblo. (Foto y texto: www. escubiello.com)
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